Para esta sesión competitiva, el rival elegido no ha sido otro que el Sevilla Atlético, que curiosamente tampoco tiene compromiso liguero este fin de semana al parar la Segunda B para recuperar partidos aplazados en estas cuatro primeras jornadas. El filial no disputará el suyo ante el Recreativo Granada en esa fecha y sí el próximo miércoles.

En el partidillo, bajo la atenta mirada de Julen Lopetegui, ejerció de árbitro el preparador físico Óscar Caro, que incluso anuló por claro fuera de juego un tanto al filial sevillista. Para, por tanto, la plantilla para tomar aire y regresar ya el lunes con la mirada puesta en el equipo vigués, que llegará con su nuevo técnico, el argentino Eduardo Coudet, al mando.